El IV Congreso Argentino de Malezas- ASACIM, fue organizado por la Consultora SEMA y con la participación de más de 700 profesionales de varios países de Latinoamérica y Estados Unidos.
Se presentó un método con un equipo que se instala en la cosechadora y resultó eficaz en especies que tienen mayor retención de semillas, las cuales una vez que ingresan a la cosechadora son destruidas en más de un 97% y el resto presentan baja viabilidad o nula.
Este sistema funciona en un amplio rango de peso de semillas de malezas, pero también una proporción de semillas no ingresa a la máquina ya que alrededor del 30% se pierden por el cabezal de cosecha, un 5% la tolva y 5% por cola de máquina.
Julián Oliva, asesor privado y director de la Especialización en Protección Vegetal de la Universidad Católica de Córdoba (UCC) comentó que la idea nace en Australia por una idea de un productor como muchas tecnologías en el agro.
“Fue un productor al que se le estaban acabando los herbicidas para manejar raigrás y observaron unos molinos que se usaron en la industria minera para romper piedras y los probó a ver si rompían semillas, así que empezaron a colocarlos atrás de las cosechadoras”.
La idea es poder destruir mecánicamente todas las semillas de malezas que ingresan a la cosechadora. La máquina es una gran dispersora de semillas en los lotes, entonces esta herramienta lo que hace es cortar ese momento de dispersión y funciona de una manera mecánica. Rompe la semilla y la semilla que está rota ya no es viable y no puede germinar en la siguiente estación.
“La clave para que funcione son malezas que retienen sus semillas al momento de la cosecha del cultivo. Por ejemplo, yo voy a cosechar una soja y tiene un problema de colorado, el colorado tiene una gran porción de semillas, entonces van a entrar en la cosecha; y la otra parte importante es que las semillas debe ser una semilla grande, como las del colorado, como la del Sorgo de Alepo” explicó Oliva.
Agregó que “tiene algún requerimiento de potencia. La información que hemos recibido es alrededor de 10 o 15 HP cuando se prende el equipo.
Hay algunos valores que hemos visto, nosotros no hemos hecho las mediciones, pero cuando se prende hablan de un mayor consumo de gasoil, de alrededor del 10%”.
Adopción y efectividad
“Es un equipo que lo va a adoptar el contratista en función de que el productor lo requiera. El sistema se lo va a pedir porque es una herramienta para agregar y para proteger a los servicios que estamos usando. Nos permite hacer realidad el mensaje del manejo integrado de malezas. Así que creemos que sí que va a pasar” expresó respecto a si esto es un planteo que se hace para que se quede en la cosecha o si es un equipo para circunstancias especiales.
En cuanto a la efectividad señaló que “de las semillas de maleza que ingresan adentro del dispositivo los valores que hemos evaluado en Argentina están arriba del 90% en Amaranthus, y valores de otras partes del mundo que están reportados pueden llegar incluso hasta el 95% y 99% destrucción, por ejemplo, en raigrás.
Los valores medidos en otros países indican una reducción del 80% con una o dos campañas, y el banco de semillas retrocede considerablemente. Nosotros tuvimos la oportunidad de volver al sitio donde habían hecho los experimentos y vimos una reducción muy significativa, combinada con un pequeño barbecho de herbicida al nacimiento, con lo cual pudimos ver que claramente es super complementario a lo que está haciendo ahora el productor”.
