Recomendaciones de Gabriel Prieto especialista de Inta Arroyo Seco sobre manejo del cultivo
“La arveja es uno de los cultivos menores, junto con lenteja y garbanzos, que tiene muy poco número de principios activos registrados para el control de malezas en comparación, por ejemplo, con trigo y con soja. Por lo tanto, tenemos mucho tiempo desde la cosecha de soja que es en abril hasta la siembra de las arvejas primaverales, que es en julio, 90 días, como para hacer todo tipo de barbecho.
Es recomendable un barbecho largo porque podemos usar un activo que esté registrado como barbecho, no necesariamente para arveja, mientras que ya cerca de la implantación del cultivo, debemos recurrir a activos que tengan registro para el cultivo de arveja”.
Si bien no son muchos, pero tampoco son pocos entre los que se encuentran, imazetapir, metribuzin, terbutilazina, flurocloridona, acetoclor, trifluralina, en fin, son todos los activos que tienen registro en arveja.
Es importante tener resuelto el tema antes de la siembra, porque normalmente después de es mucho más complicado y todo producto que agreguemos al cultivo lo va a afectar en mayor o en menor medida, más allá de que tengan registro, como el caso del metribuzin, el imazetapir. Por eso hacemos hincapié en tener resuelto el problema antes de la siembra.
Un tema no menor, la semilla debe ser, por supuesto, fiscalizada porque el productor tiene la posibilidad de dejarse su propia semilla en la medida en que sea la tercera o cuarta multiplicación partiendo de una original.
Más allá de esto, si bien es autógama, quiere decir que se fecunda no por cruzamiento, tiene un 3 a un 5% de cruzamiento en función de las condiciones ambientales, con lo cual va a degenerar pronto en mezcla dentro del lote con plantas de otras características que disminuyen la calidad del producto cosechado.
Así que esa es la primera recomendación. Variedades relativamente nuevas han ingresado al mercado, afortunadamente muchas variedades que son superadoras a lo viejo que se venía haciendo en la producción de arveja” comentó el Ingeniero agrónomo Gabriel Prieto de INTA Arroyo Seco sobre malezas y semillas.
Nutrición del cultivo
Hay dos prácticas de manejo que son fundamentales. Primero, en el caso del nitrógeno, inocular la semilla. “No hace falta fertilizar con nitrógeno la arveja. Tiene un requerimiento de aproximadamente 50 kilos de nitrógeno por tonelada de grano producido y eso tranquilamente lo provee la fijación biológica a través del inoculante que agregamos en la semilla. Por otro lado, el análisis de suelos para determinar el nivel de fósforo. Tenemos un umbral para fósforo de 13 o 14 partes por millón, debajo del cual las probabilidades de respuestas son mayores, con una eficiencia agronómica aproximadamente de 30 kilos de arveja por cada kilo de fósforo Bray elemento que agregue por encima de las 16 partes por millón la probabilidad de respuestas es mucho menor.
Desde el punto de vista nutricional, en los suelos argiudoles típicos de la región núcleo no sería necesario recurrir a otro nutriente” y sobre los inoculantes agregó que para ello es fundamental seguir las indicaciones del marbete del fabricante y hacer una buena inoculación esmerarnos, porque el inoculante en arveja no es un insumo barato dado los kilos por hectárea de semilla que insume porque va mucha cantidad de inoculante y ya no es lo mismo que en el caso de soja, donde es más económico.
En arveja el costo del inoculante puede ir entre los 15 y 25 dólares, dependiendo de la marca, de la cantidad de kilos por hectárea que yo siembre, en función de la variedad que yo siembre. Entonces tenemos que esmerarnos para que la bacteria llegue viva al suelo, tenemos que ver la compatibilidad con los terápicos de semillas, asegurarnos de que el proveedor del inoculante haya testeado esta compatibilidad para que, el fungicida que agregamos, no me mate la bacteria, teniendo en cuenta que generalmente en el tratamiento que se hace en el recipiente del carrito que lleva la semilla se mezclan estos dos activos antes de la siembra, así que tener testeado eso porque es fundamental”.
Enfermedades y plagas
“La arveja tiene algunas enfermedades que le afectan principalmente ascochyta, mildiu y oidio. Son las tres enfermedades foliares más comunes.
El oidio suele llegar sobre fin de ciclo, es parte del complejo de enfermedades de fin de ciclo que se controla con los fungicidas tradicionales, pero también el tener presente que el mildiu, que es una enfermedad del principio del ciclo, no se controla con los fungicidas tradicionales, porque es un oomycete y requiere productos específicos para el control de este falso hongo.
Otro aspecto que hace la protección son los insectos. Fundamentalmente lo que aparece todos los años es pulgón, que generalmente en la época que suele aparecer es cuando las temperaturas comienzan a subir, mediados a fin de septiembre y durante octubre, que coincide con el periodo crítico, la población se duplica cada tres días y no tenemos un freno de enemigos naturales, con lo cual hay que entrar a controlarlos en forma efectiva, donde lo contrario se lleva puesta toda la producción” explicó Gabriel Prieto.