La inclusión de fibra dietaria en la etapa preparto mejora la salud intestinal, favorece la inmunidad de las camadas y optimiza el desempeño productivo de las cerdas, destacándose su impacto positivo sobre la duración del parto, la calidad del calostro y la ingesta en lactancia.
La fibra dietaria (FD) está compuesta por carbohidratos que no pueden ser digeridos en el intestino delgado, por lo que su fermentación se produce en el intestino grueso. Su clasificación más utilizada se basa en su solubilidad en agua:
- Fibra dietaria soluble (FDS): como la pectina, los glucanos y la inulina.
- Fibra dietaria insoluble (FDI): como la celulosa, la hemicelulosa y la lignina.
Los efectos de la fibra dietaria varían según su estructura química. La FDI se fermenta lentamente por la microbiota intestinal, aporta volumen a la dieta, acelera el tránsito intestinal y aumenta el volumen de las heces. En cambio, la FDS se fermenta más rápidamente, generando metabolitos beneficiosos como los ácidos grasos de cadena corta, además de ralentizar el proceso digestivo (Chawla y Patil, 2010; Rebello et al., 2016).
Efecto sobre la microbiota intestinal
La fibra dietaria tiene un efecto prebiótico, ya que favorece el crecimiento de microorganismos benéficos en el intestino, especialmente los lactobacilos. Estos cumplen un rol clave en la salud intestinal, colaborando en la digestión y en el mantenimiento de la barrera intestinal (Fukuda et al., 2011; Huang et al., 2015; Sawiki et al., 2017).
Li et al. (2019, 2020) observaron que la ingesta de fibra soluble en hembras porcinas promueve el desarrollo de microbiota benéfica tanto en las madres como en su progenie, inhibe bacterias patógenas y mejora el funcionamiento intestinal.
Por el contrario, una baja ingesta de fibra dietaria en sucesivas gestaciones reduce la diversidad microbiana intestinal, afectando negativamente la salud de las hembras (Sonnenburg et al., 2016).
Efecto sobre el calostro y la leche
Un estudio de Shang et al. (2019) demostró que una dieta con alto contenido de fibra soluble incrementa los niveles de inmunoglobulina A (IgA) e interleucina-10 (IL-10) en el calostro, además de elevar los niveles de IgA en la leche. Este efecto mejora la inmunidad de las camadas, que dependen en gran medida del calostro para fortalecer su sistema inmune.
En cuanto al valor nutricional, Li et al. (2020) hallaron que una mayor ingesta de fibra soluble durante la gestación aumenta el contenido de grasa en el calostro y la leche, mientras que la fibra insoluble no mostró efectos significativos sobre su composición.
Efecto sobre parámetros productivos
- 1. Duración del parto
Las dietas ricas en fibra en el período preparto reducen la duración del parto y el intervalo entre nacimientos, en comparación con dietas sin fibra. Este efecto es crucial, ya que partos prolongados aumentan el riesgo de hipoxia fetal, especialmente en los últimos lechones en nacer.
Las cerdas alimentadas con dietas fibrosas presentan mayores niveles de oxitocina, hormona clave en la regulación de las contracciones uterinas. Además, la fermentación de la fibra genera ácidos grasos de cadena corta, fuente de energía que puede cubrir hasta un 30% de los requerimientos de mantenimiento, aspecto esencial en un momento de alta demanda energética como el parto (Li et al., 2020; Zhuo et al., 2020).
- 2. Ingesta de alimento en lactancia
Las cerdas alimentadas con dietas de gestación altas en fibra muestran mayor ingesta de alimento durante la lactancia, lo que se traduce en camadas más pesadas al destete. Este resultado se relaciona con una mejor sensibilidad a la insulina y con el aumento del tamaño y capacidad del tracto digestivo, facilitado por el volumen de los ingredientes fibrosos (Mosnier et al., 2010; Buchanan et al., 2012; Farmer, 2015).
Conclusión
La inclusión de fibra dietaria en la dieta de gestación es esencial, pero también lo es mantener un equilibrio entre fibra soluble e insoluble, ya que ambas cumplen funciones complementarias y determinantes en la salud y productividad de las hembras y su progenie.
En términos generales, la fibra en la dieta preparto reduce la duración del parto, mejora la calidad inmunológica del calostro y optimiza la salud intestinal, fortaleciendo así el bienestar y el rendimiento de las cerdas y sus lechones.



